Julio 2024. El 11 de julio de 1899 entró en la historia de la industria automotriz. En esta fecha, en el Palazzo Bricherasio, en Turín, se fundó la Società Anonima Fabbrica Italiana di Automobili – Torino, luego simplificada a Fabbrica Italiana Automobili Torino – y conocida por todos por su acrónimo: FIAT. La marca se expandió más allá de las fronteras italianas y se convirtió en una de las más grandes del sector automovilístico del mundo. Hoy Fiat celebra 125 años de historia y tradición, marcados por la innovación, el espíritu pionero y autos memorables.
Desde el primer auto, el 4 HP, pasando por iconos como el S61, S76, el Topolino, los nuevos 500, 600, 127, 147, Panda, Uno, Tempra, Tipo, Palio, entre muchos otros, hasta llegar a la gama actual, Fiat. ha construido una trayectoria exitosa basada en la innovación, la accesibilidad y el diseño. Cada uno de estos modelos marcó una era distinta y contribuyó a la consolidación de la marca en el mercado global. Cabe mencionar que Fiat es una de las marcas automotrices con mayor trayectoria en el mundo. Sólo en Brasil, produjo más de 18 millones de vehículos y, a lo largo de los años, estableció fuertes vínculos en el país, construyó la que hoy es una de las mayores redes de concesionarios, más de 500, repartidos por todo el territorio nacional y se consolidó como líder del mercado durante 3 años consecutivos.
«A lo largo de su historia, Fiat protagonizó momentos decisivos que marcaron la industria automotriz. Más que desarrollar automóviles, construyó sueños y oportunidades. Cumplir 125 años es una hazaña que sólo una marca con verdadera tradición puede lograr. Vale la pena destacar que América Latina es un capítulo importante en esta trayectoria, con Argentina y sus más de 100 años de historia, y Brasil jugando un papel esencial como uno de los principales mercados de Fiat, donde se desarrollaron diferentes modelos icónicos que forman parte de la vida de millones. y producidos por los latinoamericanos», destaca Alexandre Aquino, vicepresidente de la Marca Fiat para Sudamérica.
En el año de su creación, la marca comenzó a fabricar el 4 HP, también conocido como 3,5 CV. A principios del siglo XX, aprovechando la fiebre por la velocidad que se extendía por el mundo, apareció en un escenario de intensa emoción deportiva el Fiat S61, un bólido de carreras biplaza, así como el S76, conocido como la “Bestia de Turín”, con su increíble motor de 28,5 litros. En las décadas siguientes, modelos como el Topolino, el Fiat 500 y el Fiat 600 se convirtieron en iconos del diseño y democratizaron el acceso al automóvil en Europa.
Paralelamente, en 1903, Fiat cruza las fronteras del continente europeo y llega a América, eligiendo a la Argentina como su primer destino de internacionalización. Con la visión de expandir la marca más allá de Europa, esta decisión estratégica abrió el camino para que Fiat se convirtiera en un referente de la industria automotriz argentina. Al principio vendía modelos importados de Italia y, unas décadas después, la marca comenzó a invertir en la industrialización del país.
Tanto es así que la marca construyó una planta en Caseros, provincia de Buenos Aires, dedicada a la producción de automóviles, y en abril de 1960 salió de las líneas de montaje el Fiat 600D, el primer automóvil de la marca fabricado en Argentina. Además de contribuir al desarrollo industrial, Fiat también fue escuela de formación de profesionales y técnicos, convirtiéndose en el principal empleador privado del país.
En la década siguiente llegó el momento de que la marca llegara a Brasil. Más concretamente, en 1973 se firmó un acuerdo de intereses entre Fiat SpA y el Gobierno de Minas Gerais y, el 9 de julio de 1976, se inauguró la fábrica de Fiat Automóveis, en Betim, para fabricar el 147.
Una historia latinoamericana
Con más de 100 años de historia en Latinoamérica, Fiat desembarcó su primer vehículo en Argentina en 1903. Años más tarde, el 21 de mayo de 1919, la empresa italiana instaló su primera sala de exposiciones propia en Buenos Aires y creó la primera asistencia técnica para vehículos importados de Italia.
Con el éxito de los modelos italianos, la empresa abrió su primera fábrica en el 1960, en Caseros, provincia de Buenos Aires. Ese mismo año, la marca inició la producción del Fiat 600D, considerado uno de los primeros autos fabricados a gran escala en Argentina, que se fabricó hasta 1982. Miles de argentinos residentes en el país aprendieron a conducir un “Fitito”, como resulta conocido.
La evolución fue rápida. En 1963 se crea la segunda fábrica de la marca en suelo argentino, en Ferreyra, Córdoba, para producir conjuntos mecánicos. Mientras que en Palomar, también en la provincia de Buenos Aires, se construyó una unidad de chapistería y montaje. Al año siguiente se inauguró el Edificio Mirafiori como sede central. Aún en los años 1960, el mercado argentino contaba con autos como el 1100, 1500, 1600 Multicarga y el 125 Sport.
Durante la década de 1970, la expansión de Fiat continuó con la exportación de componentes de ensamblaje de automóviles en Uruguay, iniciada en 1972. Entre 1971 y 1986, el Fiat 128 marcó una época en la Argentina, siendo el primer auto de tracción delantera fabricado en el país. El vehículo también tenía motor transversal y se fabricó en versiones básica, L, Familiar, Europa e IAVA.
Desde principios de los años 1980 hasta 1995, Sevel produjo y vendió automóviles y vehículos comerciales Fiat bajo licencia, manteniendo el liderazgo en el mercado argentino. Autos como el Spazio, el Uno y el sedán Regatta tuvieron una gran aceptación por parte del público.
En 1995, Fiat Auto decidió invertir 600 millones de dólares en Argentina para fabricar automóviles de la familia Palio. Se construyó una nueva fábrica en Córdoba, incorporando el conjunto de motor y caja de cambios existente. El control de la marca, a través de Fiat Auto Argentina S.A., se retomó oficialmente el 1 de julio de 1996. En diciembre del mismo año se inició la producción de los nuevos Palio y Siena.
Después de la década de 2000, la historia de Fiat estuvo marcada por el relanzamiento del complejo industrial Ferreyra en 2008; inversión en la planta y preparación para la producción del nuevo Palio en 2012; y la modernización de la fábrica con una inversión de 500 millones de dólares para producir un auto de calidad mundial: el Fiat Cronos.
Lanzado en 2017, el Fiat Cronos llegó para revolucionar el mercado de los sedanes, siendo parte de la amplia renovación de la gama de la marca. Recientemente, el modelo alcanzó la marca de las 400 mil unidades producidas en Argentina. Además de estar presente en Argentina y Brasil, el modelo también se exporta a otros ocho países de América Latina.