Bogotá, septiembre de 2024.– El gobierno colombiano vuelve a sorprender a los ciudadanos por medio de una Ley de Financiamiento que propone más impuestos y menos incentivos a la inversión y a medidas en pro del medio ambiente.
“Luego de los trenes aéreos y de tantas otras incoherencias, el gobierno que prometió trabajar por el capitalismo funcional, por la reactivación económica y por hacer frente al cambio climático ahora quiere ralentizar la renovación del parque automotor colombiano por medio de alejar del consumidor los vehículos híbridos”, dice Pedro Nel Quijano, presidente ejecutivo de la Asociación Gremial de Concesionarios de Automotores – Aconauto.
Quijano observa cómo el estancamiento económico se está agravando con la falta de ejecución presupuestal de los ministerios y, contrario a los que se necesita, ahora el gobierno quiere más impuestos. Con el supuesto objetivo de reducir la pobreza, continúa Quijano, la política regresiva de este gobierno hace que se pierdan los empleos, tal como viene sucediendo en el sector automotor pues a menores ventas los concesionarios se ven obligados a recortar la nómina”.
Y peor aún: al aumentar los impuestos en los híbridos con el argumento peregrino de que “dado que los hogares de mayores ingresos son los que tienen la capacidad económica para adquirir estos vehículos nuevos […] En contraste, los hogares de ingresos bajos y medios, que a menudo no pueden permitirse el acceso a este tipo de tecnologías, no se benefician de la reducción impositiva”, los concesionarios afiliados en Aconauto se preguntan si gravando los híbridos sería más fácil para los hogares de ingresos bajos y medios acceder a los 100% eléctricos (BEV), y con eso contribuir a mitigar el cambio climático.
Además, para mayor incoherencia, si fuera posible que todo el mercado se volcara a comprar BEV, el país no tiene la capacidad de generación y distribución eléctrica para abastecerlos, con lo cual se crearía otro cuello de botella parecido al que se cierne sobre el país relacionado con el gas natural y la ralentización de la inversión petrolera.
Unido a lo anterior, este gobierno desconoce la experiencia de Europa y Estados Unidos y Japón en el sentido de que allá encontraron hace más de 15 años que los híbridos, en todas sus versiones, son el paso obligado para que los países transiten hacia las ‘cero emisiones’, porque tanto la capacidad de generación eléctrica como la instalación de la rede pública de carga no crecen por decreto de la noche a la mañana, sino que requieren de inversión y tiempo. Es lamentable que el ministro de Hacienda, con toda su experiencia tributaria, no advierta que a mayor carga impositiva, en este caso a los vehículos híbridos, lo que logra es menos ventas, es decir, menor recaudo.
Aconauto propone
Como una forma de contribuir a la recuperación del mercado automotor colombiano, los concesionarios agremiados en Aconauto proponen la eliminación del Impuesto al consumo y la reducción del IVA.
El resultado de una medida de este tipo es que aumentan las ventas de vehículos nuevos y, a mayor facturación, mayor es el recaudo de ingresos fiscales y se concretan más puestos de trabajo. Por último, Aconauto recuerda que, el sector automotor es fuente importante de empleo e impuestos.
